domingo, 31 de agosto de 2014

¿CÓMO ES EL AMOR VERDADERO..., EL DE DIOS?

El amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios… Dios es amor. En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. 1 Juan 4:7-9 El «amor» es un tema muy popular en la literatura, las canciones, las películas… ¿Qué no se haría en nombre del amor? Se codicia, engaña… ¡Incluso algunos matan en nombre del amor! Y todo esto porque el amor humano, en realidad fuertemente motivado por el amor a sí mismo, está muy cercano al odio. El versículo citado en el encabezamiento muestra que el verdadero amor sólo puede venir de Dios. Fue manifestado al hombre cuando apareció en la persona de Jesucristo. El Hijo de Dios vino a dar a conocer el corazón del Padre. El amor de Dios también puede ser visto en la vida de un creyente que manifiesta humildad y olvido de sí mismo. El amor no se enorgullece, pues no piensa en sí mismo, no se compara con los demás, sino que se pone a su servicio. Cristianos, ¡recordemos que en nosotros mismos no tenemos amor! Éste no emana de nuestra propia naturaleza humana, la cual es incapaz de hacer el bien según Dios. Cristo mostró, durante toda su vida, lo que es la verdadera humildad; y su muerte por seres odiosos es la mayor expresión de su amor. Nos dio a conocer a Dios, quien es amor (1 Juan 4:8). “El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo” (Romanos 5:5), para que lo irradiemos en nuestro alrededor. La responsabilidad y el papel de todo creyente es mostrar el amor de Dios que, en su pureza, “se goza de la verdad” (1 Corintios 13:6).

viernes, 29 de agosto de 2014

HAY QUE CONOCER A DIOS

… Sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde el principio hasta el fin. Eclesiastés 3:11 … A fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento. Colosenses 2:2-3 Como un insecto en la ventana El poeta latino Virgilio exclama en las Geórgicas: «¡Feliz el que ha llegado a conocer las causas de las cosas!». Mucho antes que él, el rey Salomón hacía la siguiente pregunta: “¿Quién como el que sabe la declaración de las cosas?” (Eclesiastés 8:1). Esta pregunta sigue siendo un desafío a la sabiduría humana. Los descubrimientos más sorprendentes en todos los campos, la exploración de los astros como el estudio más avanzado de lo infinitamente pequeño, sólo conducen a descubrir nuevos problemas y a dejar cada vez más de lado la respuesta a las preguntas fundamentales: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? Por muy inteligente que sea, el ser humano está encerrado dentro de los límites de su mente. Como el insecto que choca contra un cristal y se cansa tratando de alcanzar la luz, su búsqueda no lo conduce a ninguna parte y debe exclamar: “Vanidad de vanidades… todo ello es vanidad y aflicción de espíritu” (Eclesiastés 1:2, 14). Pero esta luz vino a nosotros desde afuera, desde ese exterior inaccesible. Dios se dio a conocer, habló y se revela mediante sus obras como el soberano Creador. A nosotros, criaturas perdidas y sufridas, nos revela la causa de nuestro estado. Todos pecamos; y por el pecado, el sufrimiento y la muerte entraron en el mundo. Nos mostró su amor dándonos un Salvador: Jesús. Sólo nos pide creer. ¡Esta es la única verdadera sabiduría!

jueves, 28 de agosto de 2014

DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS DA GRACIA A LOS HUMILDES

Juan 13:1-11 … Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. —Santiago 4:6 Durante la época de Semana Santa, mi esposa y yo asistimos a una reunión en una iglesia donde los participantes procuraban representar los sucesos que Jesús y sus discípulos experimentaron la noche antes de que Él fuera crucificado. Como parte de la reunión, los miembros del personal de la iglesia les lavaron los pies a algunos de los colaboradores voluntarios de la congregación. Mientras miraba, me preguntaba qué expresa más humildad en nuestra época: ¿lavar los pies de otra persona o que alguien lave los nuestros? Tanto unos como otros, los que estaban sirviendo y los servidos, mostraban distintos aspectos de la humildad. Cuando Jesús y sus discípulos se reunieron para la última cena (Juan 13:1-20), el Señor, en un servicio humilde, les lavó los pies a sus seguidores. Pero Simón Pedro se resistió, diciendo: «No me lavarás los pies jamás. Jesús le respondió: Si no te lavare, no tendrás parte conmigo» (13:8). Lavar los pies no era un simple ritual. También puede verse como una ilustración de nuestra necesidad de ser limpiados por Cristo; una limpieza que nunca se llevará a cabo si no estamos dispuestos a ser humildes delante del Salvador. Santiago escribió: «Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes» (Santiago 4:6). Recibimos la gracia de Dios cuando reconocemos su grandeza, ya que Él se humilló a sí mismo en la cruz (Filipenses 2:5-11). —La posición más poderosa en la Tierra es arrodillarse ante el Señor del universo.

miércoles, 27 de agosto de 2014

AUNQUE TE PAREZCA QUE ESTAS SOLO..., NO ES ASÍ, EL SEÑOR ESTA CONTIGO TODOS LOS DÍAS

1 Reyes 19:1-8 … un ángel le tocó [a Elías], y le dijo: Levántate, come. —1 Reyes 19:5 Carlos Whittlesey fue héroe de héroes. Líder del denominado «Batallón perdido», durante la Primera Guerra Mundial, lo premiaron con la medalla de honor por su valentía cuando su unidad quedó atrapada detrás de las líneas enemigas. Cuando se inauguró en su país la tumba al soldado desconocido, lo eligieron para que fuera el portador del féretro del primer soldado colocado en ese sitio. Dos semanas después, se presume que terminó con su vida lanzándose de un crucero en el medio del océano. Como Elías (1 Reyes 19:1-7), Carlos era fuerte en público; sin embargo, en los momentos de quietud y privacidad, experimentaba sentimientos de desesperación. Hoy las personas suelen enfrentar situaciones más tremendas de lo que pueden manejar. A veces, es una desesperación temporal producida por la fatiga, como en el caso de Elías. Este había logrado una gran victoria sobre los profetas de Baal (18:20-40), pero después, temió perder la vida y huyó al desierto (19:1-3). Sin embargo, a menudo, es más que algo desesperante y temporal. Por eso, es imprescindible que hablemos abierta y compasivamente sobre la depresión. Dios ofrece estar con nosotros en los momentos más oscuros de la vida, lo cual nos permite, a su vez, acompañar en su nombre a los angustiados. Pedir ayuda (a los demás y a Dios) quizá sea el momento más fuerte de nuestra vida. —Padre, danos valor para buscar ayuda cuando la necesitamos. La esperanza llega con la ayuda de Dios y de los demás.

martes, 26 de agosto de 2014

COMO NAVEGAR POR EL MAR DE ESTE MUNDO

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios". Romanos 8:14 En su premiado libro titulado Longitud, Dava Sobel describe un dilema que enfrentaban los antiguos marineros. Podían determinar la latitud norte o sur en que se encontraban por la duración de la luz del día o la altura del sol. Pero calcular la longitud este u oeste seguía siendo un tema complejo, hasta que el relojero John Harrison inventó el cronómetro marino. Era «un reloj que podía mantener la hora correcta desde el puerto de salida […] hasta cualquier rincón del mundo», mediante lo cual permitía que los marineros supieran en qué longitud estaban. Mientras navegamos por los mares de la vida, nosotros también tenemos una guía espiritual confiable: El Espíritu Santo. El Señor guió a su pueblo por el desierto: "Jehová iba delante de ellos, de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarlos, a fin de que anduvieran de día y de noche. Nunca se apartó del pueblo la columna de nube durante el día, ni la columna de fuego durante la noche" (Éxodo 13:21-22). En el nuevo testamento el apóstol Pablo dice: Romanos 8:14 "Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios". ¿Y cómo es esto? Hechos 13:1-3 1 Los profetas y maestros de la iglesia de Antioquía eran Bernabé; Simón, también llamado el Negro; Lucio, de la ciudad de Cirene; Manaén, que se había criado con Herodes el gobernante [a], y Saulo. 2 Un día, mientras ayunaban y adoraban al Señor, el Espíritu Santo dijo: «Aparten a Bernabé y a Saulo para que hagan el trabajo para el cual los he llamado».3 Entonces ellos ayunaron, oraron e impusieron las manos a Bernabé y Saulo, y luego los despidieron. . Luego: Hechos 16:6-10 6 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; 7 y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo permitió. 8 Y pasando junto a Misia, descendieron a Troas. 9 Y se le mostró a Pablo una visión de noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y ayúdanos. 10 Cuando vio la visión, en seguida procuramos partir para Macedonia, dando por cierto que Dios nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio. Los Apóstoles no eran ningunos improvisados que iban a predicar donde a ellos les parecía. Los guiaba El Espíritu.Santo. Como los marineros de antaño, hoy necesitamos una guía constante para ayudarnos a encontrar nuestro camino y mantener el curso. Esto es lo que sucede cuando buscamos al Señor todos los días con un corazón abierto y un espíritu dispuesto que declara: Acá estoy Señor, ¿Que debo hacer?, ¡muéstrame! —Con Dios como piloto, vas en la dirección correcta.

lunes, 25 de agosto de 2014

ESPERAR

Hechos 1:1-11 Todavía un poco, y no me veréis; y de nuevo un poco, y me veréis; porque yo voy al Padre. —Juan 16:16 No sé cómo será donde tú vives, pero, en mi caso, cuando tengo que llamar para que reparen un artefacto en mi casa, la empresa dice algo así: «El técnico estará allí entre la una y las cinco de la tarde». Como no sé cuándo va a llegar exactamente, lo único que puedo hacer es esperar. Jesús les dijo a sus seguidores que pronto los dejaría y que tendrían que esperar «un poco» (Juan 16:16). Después de resucitar, volvieron a verlo y ellos esperaban que estableciera su reino en la Tierra en ese momento. Pero Él les dijo: «No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad» (Hechos 1:7). Deberían esperar un poco más. Sin embargo, tenían que hacer algo más que esperar. Jesús también les indicó a sus seguidores que debían ser «testigos [de Él] en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra» (v. 8). Entonces, les dio el Espíritu Santo para capacitarlos para hacer esa tarea. Seguimos esperando que Jesús vuelva. Mientras tanto, en el poder del Espíritu Santo, nos deleitamos en decirles y mostrarles a otros quién es Él, qué ha hecho por todos nosotros a través de su muerte y resurrección, y también su promesa de volver. —Querido Señor, te amamos muchísimo. Queremos que nuestras palabras y vidas sean un testimonio de tu bondad y tu gracia. Por favor, utilízanos de maneras que nunca creímos posibles. ESPERAR. Aunque éste término nos lleva a pensar ligeramente en una sala de espera. cola o en una actitud pasiva; En el Reino de lo Cielos es totalmente lo contrario..., esperar en Dios nos habla de una actitud completamente activa haciendo la voluntad DE DIOS. Espera y testifica hasta que Jesús vuelva.

domingo, 24 de agosto de 2014

UNA DE LAS FORMAS DE CÓMO SE MANIFIESTA LA AMNESIA ESPIRITUAL

Salmo 118:1-14 Dad gracias al señor, porque Él es bueno; porque para siempre es su misericordia. —Salmo 118:1 lbla A veces, cuando enfrentamos momentos difíciles, tal vez contraemos amnesia espiritual y nos olvidamos de la gracia de Dios. Pero una buena manera de recuperar un corazón agradecido es apartar un tiempo en el cual no haya distracciones, recordar de manera intencional cómo nos proveyó el Señor en el pasado y dar gracias. Cuando los hijos de Israel se encontraron en un desierto caluroso y árido, experimentaron una pérdida de memoria en cuanto a la gracia de Dios. Empezaron a desear volver a Egipto y disfrutar de todos sus alimentos (Éxodo 16:2-3); y después, se quejaron porque no tenían agua (17:2). Habían olvidado los actos milagrosos que había hecho el Señor para liberarlos y las riquezas que les había provisto en abundancia (12:36). Estaban encerrados en las circunstancias del momento y no recordaban la gracia con que Dios les había suplido en el pasado. El salmista nos desafía: «Dad gracias al señor, porque Él es bueno; porque para siempre es su misericordia» (Salmo 118:1 lbla). La palabra misericordia alude a un «amor inalterable», y se refiere a la fidelidad de Dios. Él prometió estar siempre presente para ocuparse de sus hijos. Al recordar situaciones específicas en las que el Señor nos proveyó en el pasado, podemos mejorar nuestra perspectiva. ¡El amor inalterable de Dios permanece para siempre! —HDF Recordar cómo proveyó Dios en el pasado da fortaleza y esperanza para el presente.

sábado, 23 de agosto de 2014

COMO TENER CONTROLADA A LA OSCURIDAD.

Mateo 5:11-16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre… —Mateo 5:16 En el libro de J. R. R. Tolkien, El hobbit, el mago Gandalf explica por qué escogió un pequeño hobbit como Bilbo para que acompañara a los enanos a pelear contra el enemigo: «Saruman cree que solo un gran poder puede mantener a raya el mal, pero mi experiencia es otra. Descubrí que son las pequeñas acciones diarias de personas comunes las que mantienen alejada la oscuridad; los pequeños actos de amor y bondad». Esto es lo que Jesús también nos enseña. Al advertirnos que viviríamos en épocas de oscuridad, nos recordó que, por Él, somos «la luz del mundo» (Mateo 5:14), y que nuestras acciones serían nuestro poder contra la oscuridad, para la gloria de Dios (v. 16). Además, Pedro, al escribirles a los cristianos perseguidos, les pidió que vivieran de tal modo que aquellos que los acusaban «[glorificaran] a Dios en el día de la visitación, al considerar [sus] buenas obras» (1 Pedro 2:12). Hay una fuerza que la oscuridad no puede contener: los actos de amor y bondad hechos en el nombre de Jesús. Los hijos de Dios que ponen la otra mejilla, recorren la segunda milla, y perdonan e incluso aman a sus enemigos tienen poder para frenar el mal. Por eso, busca hoy la oportunidad de realizar un acto de bondad para que la luz de Cristo alumbre a otros. —Señor, enséñame cuán necio es tratar de pagar mal por mal. ¡Que tu bondad para conmigo me lleve a actuar del mismo modo con los demás! Ilumina tu mundo con actos bondadosos.

viernes, 22 de agosto de 2014

EN EL AMOR DE DIOS SE TOMAN COMO PROPIAS LAS NECESIDADES AJENAS

Salmo 112 Resplandeció en las tinieblas luz a los rectos; es clemente, misericordioso y justo. —Salmo 112:4 En el país africano donde vive una amiga mía, el agua es un elemento valiosísimo. A menudo, la gente tiene que recorrer largas distancias para recoger agua en arroyos pequeños y contaminados, lo que genera enfermedades y muertes. A las organizaciones como orfanatos e iglesias les resulta difícil servir a las personas que no tienen agua. Pero eso está empezando a cambiar. Con el liderazgo de mi amiga y las donaciones generosas de algunas personas que son miembros de iglesias establecidas, están comenzando a cavarse pozos de agua. En este momento, al menos seis pozos nuevos están funcionando, lo que permite que esas iglesias sean centros de esperanza y aliento. Gracias a este suministro de agua, también se podrán abrir un centro de salud y un hogar para 700 huérfanos. Esta es la clase de amor que puede fluir de los creyentes en Cristo, tras haber experimentado el amor y la generosidad de Dios. Pablo afirma en 1 Corintios 13 que, si no tenemos amor, nuestras voces solo hacen ruido en los oídos de la gente y nuestra fe no significa nada. Y el apóstol Juan declara que, si tenemos posesiones materiales y hacemos algo cuando vemos que otros tienen necesidades, eso demuestra que el amor de Dios mora en nosotros (1 Juan 3:16). El Señor desea que seamos «compasivos» (Salmo 112:5 rvc) con los necesitados, porque su corazón es misericordioso con nosotros. —La bondad es el cristianismo con ropa de trabajo.

jueves, 21 de agosto de 2014

MI YUGO ES FÁCIL Y LIGERA MI CARGA..., DIJO EL SEÑOR

Hebreos 10:32-39 No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón. —Hebreos 10:35 Un antiguo adagio señala: «El que mucho abarca poco aprieta». Es sabio no asumir más responsabilidades de las que uno puede manejar. Sin embargo, a veces, es muy probable que nos sintamos abrumados por el tamaño y la dificultad de la tarea que hemos aceptado realizar. Esto puede suceder también en nuestro andar en Cristo por la fe, cuando nuestro compromiso con Dios parece demasiado pesado para sobrellevar. Pero Él tiene una palabra de aliento para darnos cuando nuestra confianza titubea. El escritor de Hebreos exhortó a sus lectores a recordar la valentía que habían demostrado durante los primeros días de su fe (10:32-33). A pesar de los insultos en público y la persecución, ayudaron a los creyentes presos y aceptaron gozosos la confiscación de sus bienes (vv. 33-34). Con eso en mente, dice: «No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa» (vv. 35-36). Nuestra confianza no depende de nosotros, sino que está fundamentada en Jesús y en su promesa de regresar en el momento exacto (v. 37). Es el poder de Dios lo que nos capacita para seguir en nuestro sendero de fe. Recordar la fidelidad del Señor en el pasado estimula nuestra confianza en Él en el presente. —Confiar en la fidelidad de Dios estimula nuestra confianza.

miércoles, 20 de agosto de 2014

LOS QUE SON GUIADOS POR EL ESPÍRITU SANTO..., ESTOS SON HIJOS DE DIOS

Números 9:15-23 Al mandato del Señor acampaban, y al mandato del Señor partían, guardando la ordenanza del Señor… —Números 9:23 En una exhibición canina cerca de mi casa, vimos la presentación de un lebrel escocés. Tras la orden de su dueño, el animal se alejaba corriendo varios metros y regresaba de inmediato, saltaba cercas e identificaba objetos usando su sentido del olfato. Después de terminar cada ejercicio, se sentaba a los pies de su amo y esperaba más indicaciones. La atención cuidadosa de este perro a la instrucción de su dueño me recordó la devoción que Dios deseaba que su pueblo tuviera hacia Él mientras lo seguía en el desierto. El Señor lo guiaba de una manera singular: su presencia aparecía en forma de una columna o nube. Si la nube subía, quería que su pueblo se trasladara a otra zona. Si descendía, debían quedarse donde estaban. «Al mandato del Señor acampaban, y al mandato del Señor partían, guardando la ordenanza del Señor…» (Números 9:23). Los israelitas cumplían con esta práctica día y noche, independientemente del tiempo que tuvieran que permanecer en un mismo lugar. Dios no solo estaba probándolos, sino que los guiaba hacia la tierra prometida (10:29). Quería llevarlos a un lugar mejor. Lo mismo sucede con nosotros cuando nos pide que lo sigamos: desea guiarnos a un sitio donde nuestra comunión con Él se profundice. Su Palabra nos asegura que el Señor es amoroso y fiel al guiar a aquellos que le siguen humildemente. —Dios les pide a sus hijos que sigan al Líder.

martes, 19 de agosto de 2014

¿CUÁL ES NUESTRA NECESIDAD EN ESTE MOMENTO?

Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada. Lucas 10:41-42 (Lea Lucas 10:38-42) Marta y María recibieron a Jesús y a sus discípulos en su casa. Como había mucho trabajo, Marta estaba muy ocupada preparando todo, mientras María escuchaba al Maestro, sentada a sus pies. Marta, irritada, se acercó al Señor y le dijo en tono de reproche: “Dile, pues, que me ayude”. Quizá nosotros también hubiésemos actuado del mismo modo ante la aparente ausencia de sentido práctico de María. Pero Jesús no lo veía así, por ello dijo a Marta reiteradamente y con cariño: “Marta, Marta”, para mostrarle un punto importante. Lo principal no es estar activo hasta el punto de inquietarse, sino aprovechar todas las oportunidades para escuchar al Señor con amor y respeto. Así que María había escogido la buena parte, la cual no le sería quitada ni en el presente ni en la eternidad. La buena parte es la útil. Sólo hay una buena actitud, y es la misma para todos: estar primero a los pies del Señor para escucharlo, y luego servirle. Marta no hacía mal en servir, pero tampoco debía haber estado preocupada con tantos quehaceres. Todo lo que nos aleja del Señor afecta la calidad de nuestra vida cristiana. Esforcémonos en imitar el ejemplo de María, quien se tomaba el tiempo para recibir con gozo el mensaje de Jesús, y seamos diligentes como Marta para servir al Señor. “En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor… compartiendo para las necesidades de los santos; practicando la hospitalidad” (Romanos 12:11, 13).

domingo, 17 de agosto de 2014

CÓMO ES EL RASTRO QUE DEJAMOS EN NUESTRO PEREGRINAR POR ESTE MUNDO

La memoria del justo será bendita. Proverbios 10:7 Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas; el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca. 1 Pedro 2:21-22 Allá arriba en el cielo, a 10.000 metros de altura, el avión, por muy grande que sea, casi no se ve. Pero lo que todo el mundo puede ver es el largo rastro de color blanco que el avión deja en el cielo, a veces visible mucho tiempo después de la desaparición del avión. ¿Qué rastro hemos dejado en el recuerdo de los que nos conocieron? ¿Qué huella dejamos en el corazón de los que nos rodean, en nuestro cónyuge, nuestros hijos, nuestra familia y nuestros amigos? Nos gustaría mucho dejar un rastro de pureza, de amor, de ánimo y de paz. Pero quizá tengamos un peso en la conciencia y sufrimos por haber dado un mal ejemplo. Sin embargo, no es demasiado tarde para reconocer nuestros errores y cambiar de vida. ¡Vayamos a Jesús! Él toma nuestras vidas tales como están, aniquiladas y estropeadas por el pecado. Él las purifica y las transforma. ¿Significa esto que la amargura cede el lugar a la dulzura, el rencor al perdón, el egoísmo a la compasión, el orgullo a la humildad? ¡Desgraciadamente no siempre es así! Pero algunos recordarán una palabra, un gesto de cariño o quizás una advertencia que les impidió involucrarse en un mal camino. Nosotros ciertamente recordamos una conversación, una visita o una carta que nos animó. De todos modos, el primer deseo del creyente no es dejar un maravilloso recuerdo de sí mismo, sino más bien hacerse pequeño para dejar que Cristo sea visto en él. Juan el Bautista dijo: “Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe” (Juan 3:30).

sábado, 16 de agosto de 2014

CUANDO ALGUNO ES TENTADO. NO DIGA QUE ES TENTADO DE PARTE DE DIOS; PORQUE DIOS NO PUEDE SER TENTADO POR EL MAL. NI TIENTA A NADIE

Cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte. Santiago 1:14-15 El que quiere amar la vida y ver días buenos… apártese del mal, y haga el bien. 1 Pedro 3:10-11 “No nos metas en tentación…”, piden cada día innumerables creyentes (Mateo 6:13), pero al mismo tiempo muchos de ellos se exponen con ligereza a las tentaciones. Es cierto que éstas son mucho más difíciles de evitar debido a que en nuestra sociedad estamos rodeados de imágenes provocantes, explotadas más que nunca por la publicidad. Con el pretexto de que nos hemos liberado de los tabúes, de hipocresías y de complejos, hoy se exponen sin pudor en carteles, en la televisión, en internet, en sitios públicos… imágenes que constituyen una verdadera agresión permanente para los ojos y los sentidos. «¡No tratemos de cohabitar pacíficamente con la tentación!, escribió un autor cristiano. Si mira con complacencia aquello que provoca en usted malos pensamientos, deseos que le dominan, está abriendo la puerta al pecado y se expone a caer en él. Si el puesto de periódicos y revistas o ciertas páginas de internet son la fuente de una curiosidad malsana, ¡aléjese de ellos! Si su relación con algunas personas le vuelven vulnerable, deje de frecuentarlas». Si queremos contar con el socorro de Dios para resistir, es decir, para mantenernos puros en medio de un mundo perverso y malsano, siempre debemos ser conscientes de nuestra debilidad y del poder del diablo. Nunca olvidemos que detrás de la tentación siempre está el Tentador. ¡Huyamos de ella!

viernes, 15 de agosto de 2014

ABRE MIS OJOS, Y MIRARÉ LAS MARAVILLAS DE TU LEY SALMO 119:18

Tu dicho me ha vivificado. Salmo 119:50 Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino. Salmo 119:105 Todo el mundo está de acuerdo en reconocer que la Biblia ocupa un lugar importante en el patrimonio cultural y religioso de la humanidad. ¿Por qué, pues, considerarla desfasada con respecto al mundo actual? ¿Por qué la Biblia no respondería a las preocupaciones del hombre de hoy? Las necesidades fundamentales del hombre, ¿habrán cambiado tanto? Querido lector, tómese un tiempo para leer la Biblia. Quizás usted diga: «Lo he intentado, pero poco entiendo». Sin embargo, su *mensaje esencial es comprensible para todos. Comience preferiblemente por el Nuevo Testamento: los evangelios, los Hechos de los apóstoles y las epístolas. Evite leer al azar, siga un orden en su lectura. No se deje desanimar por un pasaje que le parezca difícil, continúe la lectura. El lector sincero será interpelado por los temas tratados: Dios, el hombre, el sentido de la vida y de la muerte. La lectura de la Biblia establece una relación con una persona viva: Jesucristo. Su mensaje ha transformado totalmente la vida de innumerables hombres y mujeres. No es un libro reservado para los sabios, los teólogos o los místicos, sino que es un libro para todos. Léalo con sencillez, con esperanza, y en sus páginas descubrirá a un Dios vivo que da la vida. ¡Él lo escribió para que usted lo lea! Alguien escribió: «Es el libro que ha secado el mayor número de lágrimas, ha iluminado el mayor número de conciencias, ha apaciguado al mayor número de remordimientos y regenerado el mayor número de caracteres».

jueves, 14 de agosto de 2014

LA BIBLIA EL MAYOR BEST SELLER DE LA HISTORIA

Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia. 2 Timoteo 3:16 Nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo. 2 Pedro 1:21 La Biblia, libro único, es una especie de biblioteca de 66 libros: 39 forman parte del Antiguo Testamento y 27 del Nuevo Testamento (incluidos los cuatro evangelios). Más de 40 autores, inspirados por Dios, escribieron esos libros durante un período de más de 15 siglos: políticos, reyes, un pastor, un pescador, un médico… Escribieron desde un desierto, un calabozo, un palacio, una cárcel, el exilio… El estilo de estos libros es igualmente muy variado: relatos, poesía, proverbios, profecías… La Biblia no es ni un tratado científico, ni un manual de historia, ni un tratado de filosofía, sin embargo trata temas fundamentales como la creación del Universo y del hombre, el tema del bien y del mal, la vida cotidiana, el futuro del hombre y su salvación. Quizás usted diga: «¿Qué tengo yo que ver con ese libro antiguo?». ¡La Biblia siempre es actual debido a su contenido! Al igual que nosotros hoy, los hombres y mujeres del tiempo de la Biblia buscaban la felicidad, la paz, la seguridad. Respecto a estas necesidades, la Biblia revela el plan de Dios para su criatura en el presente y en el futuro; plan lleno de amor y luz. Al lector atento, que recibe el mensaje sin prejuicios, la Biblia le da paz, perdón, esperanza, consuelo, y pasa a ser el guía seguro de su vida. “La aceptasteis, no como palabra de hombres, sino según lo es verdaderamente, la palabra de Dios” (1 Tesalonicenses 2:13 ).

miércoles, 13 de agosto de 2014

LAMPARA ES A MIS PIES TU PALABRA Y LUMBRERA EN MI CAMINO

El Señor dijo a Moisés:… te daré tablas de piedra, y la ley, y mandamientos que he escrito. Éxodo 24:12 (Jesucristo dice El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. Marcos 13:31 La palabra ‘Biblia’ viene de una palabra griega que significa ‘libro’. ¡La Biblia es el libro por excelencia! También es el libro de los récords: –Primer libro impreso por Gutenberg hacia el año 1450. –El más combatido: en el transcurso de los siglos fue prohibido por emperadores, reyes, jefes de estado, jefes religiosos. Fue quemado, escarnecido; estaba condenado a desaparecer. Sin embargo, hoy, en el siglo 21, sigue siendo: –El más traducido: totalmente o en parte en más de 2.550 idiomas o dialectos. –El más difundido: seis mil millones de Biblias o partes de la Biblia en menos de dos siglos. Para el historiador, la Biblia es una fuente de información sobre las civilizaciones antiguas. Para el artista y el escritor ha sido una fuente de inspiración: cuadros, esculturas, obras musicales y literarias. Del mismo modo, muchas expresiones de nuestro lenguaje han sido tomadas de la Biblia. La historia de su transmisión es sorprendente: desde Moisés, hace unos 3.500 años, hasta la invención del papel, los textos bíblicos fueron grabados en tablas de arcilla, escritos en papiros y luego en pergaminos. Durante unos treinta siglos, innumerables copistas trabajaron con mucho esmero copiando los textos bíblicos. Pero con la imprenta y las tecnologías modernas, todo cambió. La Biblia sigue estando ahí. ¡Dios, a lo largo de los siglos, siempre ha velado sobre su Palabra!

martes, 12 de agosto de 2014

BUSCAD PRIMERAMENTE EL REINO DE LOS CIELOS...

Buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Colosenses 3:1 Puestos los ojos en Jesús… el cual… se sentó a la diestra del trono de Dios. Hebreos 12:2-3 Entonces Jesús vino… a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí?” (Mateo 3:13-14). El Hijo de Dios tomó lugar en medio de los pecadores arrepentidos. ¡Había venido por ellos! “Los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia” (Mateo 3:16-17). ¡Qué grandiosa escena! El cielo se abrió, el Espíritu descendió sobre Jesús y el Padre proclamó la grandeza de aquel a quien no se debía confundir con los que le rodeaban. Esteban compareció ante un tribunal hostil, pero “puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios” (Hechos 7:55-56). Para ese mártir, que en unos momentos sería lapidado, ¡qué maravilloso consuelo ver a Jesús en el cielo, listo para recibirle! En los dos casos los cielos se abrieron para hacer resaltar la gloria de Jesucristo. Nosotros también estamos invitados a ver por la fe la gloria de nuestro Señor Jesucristo en el cielo. Esta contemplación producirá efectos positivos en nuestra vida y en nuestro testimonio: “Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor” (2 Corintios 3:18).

lunes, 11 de agosto de 2014

EN CRISTO HAY ABUNDANTE AGUA...

Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente. Apocalipsis 22:17 Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. 1 Juan 4:16 Una mañana veraniega paseaba al borde de un río situado en un campo a donde yo iba a menudo desde mi infancia. Viendo correr el agua y escuchando el agradable ruido que producía, de repente me di cuenta de que el agua de ese río nunca había dejado de correr, ni durante el día ni durante la noche, desde tiempos inmemorables. Entonces pensé en el siguiente pasaje: “El río de Dios, lleno de aguas” (Salmo 65:9). Amigos cristianos, así es la gracia de Dios. Ella riega incansablemente nuestras vidas con su inagotable amor. ¡El río de Dios nunca se seca, pues Dios jamás dejará de amarnos! El nivel de agua de un río aumenta o disminuye según la ausencia o abundancia de lluvia, pero Dios siempre permanece fiel; su amor nunca cambia. Por lo tanto, seamos quienes seamos, independientemente de nuestro pasado, estemos cargados o sedientos, podemos beber en el río de Dios, es decir, creer en su amor y recibirlo personalmente. ¿Nuestra alma tiene realmente sed de Dios, del Dios vivo? ¿Suspira por Dios, como el ciervo brama por las corrientes de las aguas? (Salmo 42:1-2). ¡Lo que falta no es el agua, sino la sed! Para que nuestras vidas no se sequen, tenemos que beber del agua del río de Dios, sacar agua con gozo en las fuentes de la salvación (Isaías 12:3). Entonces seremos “como árbol plantado junto a corrientes de aguas, que da fruto a su tiempo, y su hoja no cae; y todo lo que hace, prosperará” (Salmo 1:3).

sábado, 9 de agosto de 2014

SENDAS DIOS HARÁ DONDE PIENSAS QUE NO HAY

El sendero de Dios Salmo 77:10-20 En el mar fue tu camino, y tus sendas en las muchas aguas… —Salmo 77:19 El Túnel del Canal de la Mancha se inauguró el 6 de mayo de 1994, casi dos siglos después de que Albert Mathieu, un ingeniero de Napoleón, lo propusiera por primera vez. En la actualidad, este paso subacuático de unos 50 kilómetros de largo permite que miles de personas, automóviles y camiones viajen en tren todos los días entre Inglaterra y Francia. Durante cientos de años, la gente navegó por ese canal, hasta que se terminó esta novedosa manera de atravesarlo. Dios también planeó una ruta inesperada para su pueblo, de la cual leemos en Éxodo 14:10-22. Frente a la muerte segura, fuera a manos del ejército de Faraón o ahogándose, los israelitas estaban al borde del pánico. Pero Dios abrió el Mar Rojo y ellos lo atravesaron por el lecho seco. Años después, el salmista Asaf utilizó este acontecimiento como una evidencia del gran poder de Dios: «En el mar fue tu camino, y tus sendas en las muchas aguas; y tus pisadas no fueron conocidas. Condujiste a tu pueblo como ovejas por mano de Moisés y de Aarón» (Salmo 77:19-20). Dios puede crear caminos donde nosotros solo vemos obstáculos. Cuando el sendero que está por delante parece incierto, es bueno recordar lo que Dios hizo en el pasado. Él se especializa en abrir sendas en cualquier circunstancia; pasos que nos muestran su amor y poder. ¡VAMOS PUEBLO MÍO! ¡AUNQUE UN EJERCITO ACAMPE CONTRA MI, AUNQUE CONTRA MI SE DECLARE GUERRA. NO TEMERÁ MI CORAZÓN! !!! PORQUE EL SEÑOR ESTA CON NOSOTROS!!! VAMOS A CAMINARLES SOBRE LAS CABEZAS DE ELLOS PARA SEGUIR AVANZANDO HACIA EL OBJETIVO QUE EL SEÑOR NOS HA DADO!!! —Señor, cuando solo vea problemas, ayúdame a recordar tu amor y fidelidad en el pasado. El Dios que creó un camino para salvarnos puede, sin duda, ayudarnos a atravesar las pruebas.

viernes, 8 de agosto de 2014

...Y DIOS SE ACORDÓ DE LO QUE LE HABÍA PROMETIDO A SU SIERVO

Génesis 6:11-22 Pero Noé halló gracia ante los ojos del Señor. —Génesis 6:8 Según una fábula africana, cuatro dedos y un pulgar vivían juntos en una mano. Eran amigos inseparables. Un día, vieron un anillo de oro junto a ellos y conspiraron para llevárselo. El pulgar dijo que estaba mal robarlo, pero los otros cuatro dedos lo trataron de cobarde y santurrón, y no quisieron ser más sus amigos. Al pulgar no le importó, ya que no quería involucrarse en esa mala acción. La leyenda continúa diciendo que, por esta razón, el pulgar sigue manteniéndose separado de los otros dedos. Esta fábula me recuerda que, a veces, nosotros sentimos que estamos solos cuando nos rodea la maldad. En la época de Noé, la Tierra estaba llena de violencia; todo pensamiento de cada corazón «era de continuo solamente el mal» (Génesis 6:5, 11). No obstante, «Noé halló gracia ante los ojos del Señor» (v. 8). Totalmente consagrado a Él, este hombre lo obedeció y construyó el arca. El Señor, en su gracia, le perdonó la vida a él y a su familia. Dios también nos ha mostrado su gracia a través de la vida, muerte y resurrección de su Hijo Jesús. No nos faltan razones para honrarlo y defender nuestras convicciones en su nombre en nuestra vida diaria. Él siempre está cerca, incluso mora en nosotros, para que nunca estemos solos. Sus oídos están atentos a nuestro clamor (Salmo 34:15). —Es fácil seguir a la multitud, pero se requiere valentía para mantener las convicciones.

jueves, 7 de agosto de 2014

COMO ES "EL TEMA" CON LAS PERSONAS DIFÍCILES

Efesios 4:1-12 [Andad] como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, […] soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor. —Efesios 4:1-2 En el libro Dios en el banquillo, el autor C. S. Lewis describe la clase de personas con las que nos resulta difícil llevarnos bien. El egoísmo, el enojo, los celos u otras particularidades suelen sabotear nuestra relación con ellas. A veces, pensamos: La vida sería mucho más fácil si no tuviéramos que batallar con personas tan difíciles. Después, Lewis invierte las cosas y nos hace ver que estas son las frustraciones que Dios tiene que soportar con cada uno de nosotros día tras día. Escribe: «Tú eres esa clase de persona. Tienes una falla terrible en tu carácter. Todas las esperanzas y los planes de los demás han naufragado una y otra vez en tu carácter, tal como tus esperanzas y planes lo han hecho en el de ellos». Esta conciencia de nuestra condición personal debe motivarnos a tratar de aplicar la misma paciencia y aceptación hacia los demás que Dios nos muestra diariamente. En Efesios, Pablo nos exhorta a armarnos «con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor» (4:2), y a aplicarlo en nuestras relaciones interpersonales. La persona paciente está mejor capacitada para tratar con otra que es difícil, sin que esto le provoque enojo ni deseos de vengarse. Por el contrario, puede soportar y actuar con consideración a pesar del comportamiento desagradable de los demás. ¿Hay personas difíciles en tu vida? Pídele a Dios que muestre su amor a través de ti. —Ve a los demás como Dios te ve a ti.

miércoles, 6 de agosto de 2014

SABIENDO ESTO...

Romanos 7:18-25 Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien… —Romanos 7:18 En una interpretación de Fernando Ortega del himno Tal como soy, puede oírse tenuemente en el fondo la voz de Billy Graham, recordando una enfermedad que padeció y durante la cual pensó que iba a morir. Mientras meditaba en su pasado, se daba cuenta de cuán pecador era y de cómo seguía necesitando el perdón de Dios cada día. Graham estaba poniendo punto final al concepto de que, separados de Dios, estamos bien. Podremos sentirnos bien en lo personal, pero esta confianza debe proceder de la certeza de que somos hijos de Dios profundamente amados (Juan 3:16) y no de que seamos muy buenos (Romanos 7:18). El primer paso para convertirse de verdad en una «buena» persona como seguidor de Cristo es dejar de simular que somos inherentemente buenos y pedirle a Dios que nos haga lo mejor que podamos ser. Fracasaremos muchas veces, pero Él seguirá ayudándonos a crecer y transformándonos. El Señor es fiel y, a su manera y en su tiempo, lo hará. En sus últimos años, el escritor del himno Sublime gracia, John Newton, sufría de demencia senil y lamentaba haber perdido la memoria. No obstante, afirmaba con confianza: «Recuerdo dos cosas: soy un gran pecador y Jesús es un grandioso Salvador». En lo que respecta a la fe, estas son las únicas cosas que una persona necesita saber. —Aceptar la gracia de Dios es experimentar su paz.

lunes, 4 de agosto de 2014

CIUDAD DE REFUGIO: LA IGLESIA DE JESUCRISTO Y NO DE HOMBRES

Salmo 59:10-17 … cantaré de tu poder, y alabaré de mañana tu misericordia; porque has sido mi amparo y refugio en el día de mi angustia. —Salmo 59:16 Cuando entrábamos en un pueblo de Australia, nos recibió un cartel que decía: «Damos la bienvenida a todos los que buscan refugio y asilo». Esta clase de recibimiento parece evocar el concepto del Antiguo Testamento sobre las ciudades de refugio. Durante aquella dispensación, estas ciudades (Números 35:6) se establecieron para brindar refugio a las personas que, accidentalmente, habían matado a alguien y necesitaban protección. Dios hizo que el pueblo determinara ciudades como estas para que se salvaguardaran. No obstante, este concepto trasciende su aplicación a la antigua Israel. Más allá de eso, las ciudades de refugio reflejaban el corazón de Dios hacia todas las personas. Él anhela ser el lugar donde nos sintamos seguros en medio de los fracasos, las angustias y las pérdidas de la vida. En el Salmo 59:16-17, leemos: «Pero yo cantaré de tu poder, y alabaré de mañana tu misericordia; porque has sido mi amparo y refugio en el día de mi angustia. Fortaleza mía, a ti cantaré; porque eres, oh Dios, mi refugio, el Dios de mi misericordia». Para los corazones heridos de todas las generaciones, nuestra «ciudad de refugio» no es un lugar, sino una Persona: el Dios que nos ama con amor eterno. Que encontremos nuestro refugio y descanso en Él. —Se puede hallar refugio en la Roca de los siglos.